La periodoncia trata las enfermedades que afectan a los tejidos que sujetan los dientes. Las patologías en dichos tejidos son las principales causas de la pérdida de las piezas, y en conjunto se conocen como enfermedad periodontal.
Son dolencias de origen bacteriano, que a menudo pasan inadvertidas para el paciente y se convierten en crónicas porque se presentan asintomáticas. Por lo general, muestran una serie de señales, de menor a mayor gravedad, por las que conviene acudir cuanto antes al dentista:
La mejor manera de prevenir la enfermedad periodontal es mantener una escrupulosa higiene diaria y realizar visitas periódicas al odontólogo para acometer tareas de limpieza y mantenimiento que solo se pueden efectuar en consulta.